Dentro del intrincado tapiz de las operaciones corporativas, los espectros omnipresentes de los riesgos, amenazas y desafíos de seguridad tejen una narrativa diaria para cada empresa. Si bien estos términos pueden confundirse casualmente, sus sutilezas tienen implicaciones profundas. Comprender los matices que los distinguen es fundamental para fortalecer sus activos en la nube.
Para aclarar las distinciones:
- Riesgos: El volcán inactivo
Como un volcán inactivo, los riesgos yacen debajo de la superficie y encarnan el potencial latente de pérdida de datos o exposición a vulnerabilidades.
- Amenazas: Sombras acechantes
Como sombras acechantes, las amenazas se materializan como entidades tangibles o ataques específicos dentro del panorama de la ciberseguridad.
- Desafíos: El laberinto
Los desafíos en seguridad en la nube son comparables a navegar por un laberinto que implica obstáculos intrincados para las organizaciones.
Imaginemos, por ejemplo, un punto final de API suspendido en la extensión etérea de la nube, expuesto a la Internet pública. Este puente metafísico plantea un riesgo similar a la delicada tensión que precede a una tormenta. El actor malintencionado que intenta acceder a datos confidenciales a través de esta API es la amenaza, un fantasma elusivo armado con diversas técnicas. Mientras tanto, la organización lucha por preservar la santidad de las API públicas y, al mismo tiempo, ofrecer una mano complaciente a los usuarios o clientes legítimos.
Una sinfonía integral de seguridad en la nube orquesta armoniosamente estas tres dimensiones, asegurando que no haya grietas disonantes que dañen la base. Imagine cada aspecto como una lente única, que arroja luz sobre diversas facetas de la seguridad en la nube. Una estrategia resiliente debe componer hábilmente controles de seguridad para moderar los riesgos, ejecutar un pas de deux de codificación e implementación segura para frustrar las amenazas y coreografiar soluciones culturales y técnicas para superar los desafíos. Esta coreografía multifacética asegura el escenario para su negocio, lo que le permite hacer piruetas y prosperar de manera segura dentro del panorama dinámico de la nube.
Cómo afrontar los desafíos de seguridad en la nube
En lo intrincado panorama de la seguridad en la nubeEl camino implica reconocer que eliminar el riesgo es una aspiración noble. Sin embargo, la maestría absoluta reside en la gestión experta del riesgo. Anticipar los obstáculos potenciales le proporciona la previsión necesaria para manejarlos dentro de su entorno operativo específico. Entonces, ¿cuáles son los riesgos distintivos entrelazados con la seguridad en la nube?
Supervisión humana
La previsión de Gartner revela una profecía asombrosa. Para 2025, 99% de fallas de seguridad en la nube tendrán su origen en diversos matices de error humano. La creación de aplicaciones comerciales conlleva inherentemente el riesgo de errores humanos accidentales. Los riesgos aumentan significativamente cuando estos reinos digitales residen dentro de la nube pública. El atractivo de la nube, que es fácil de usar, a menudo tienta a las personas a implementar API sin la atenta mirada de los controles adecuados, lo que genera vulnerabilidades dentro de su tapiz de seguridad. El remedio para el error humano radica en construir controles sólidos y guiar a los usuarios hacia decisiones informadas. Cambie el enfoque de asignar culpas a las personas y rediríjalo hacia el perfeccionamiento de los procesos y la construcción de barandillas para fomentar un ecosistema inherentemente seguro.
El peligroso viaje de los datos
Una filtración de datos despliega sus siniestras alas cuando información sensible escapa a tu tutela sin tu consentimiento o conocimiento. Los datos emergen como el santo grial para los atacantes cibernéticos, convirtiéndolos en el objetivo principal de sus escapadas digitales. Las configuraciones incorrectas de la nube y la ausencia de una protección robusta en tiempo de ejecución crean la tormenta perfecta, invitando a entidades maliciosas a arrebatar estos codiciados datos. Las repercusiones de una filtración de datos varían según la naturaleza de los datos robados.
- La información de identificación personal (PII) y la información de salud personal (PHI) se explotan como activos valiosos en la web oscura, lo que contribuye al robo de identidad y a las actividades de phishing.
- A nivel interno, los documentos y correos electrónicos confidenciales pueden utilizarse como armas para dañar la reputación de una empresa o manipular los precios de las acciones.
- Las empresas que dependen en gran medida de los servicios en la nube se enfrentan a una amenaza importante y siempre presente: las violaciones de datos.
- El uso ilícito de información de identificación personal (PII) y de información de salud protegida (PHI) en mercados clandestinos subraya la importancia de implementar prácticas de manejo seguras.
- Los documentos internos comprometidos tienen consecuencias de largo alcance que afectan la percepción pública y la estabilidad financiera de una empresa.
- Las empresas deben priorizar medidas de seguridad sólidas para salvaguardar la información personal y corporativa y mitigar los riesgos.
- Adoptar un enfoque proactivo en materia de ciberseguridad es esencial para adaptarse y defenderse de las amenazas cambiantes que afectan a personas y organizaciones.
Mala configuración
El repertorio en expansión de servicios en la nube ofrecidos por diversos proveedores presenta un desafío particular: la configuración incorrecta. Cada proveedor tiene sus propias configuraciones predeterminadas, y cada servicio cuenta con implementaciones y peculiaridades distintivas. A medida que las organizaciones lidian con las complejidades de proteger muchos servicios en la nube, los adversarios aprovechan las oportunidades que surgen de las configuraciones incorrectas. Hasta que se alcance la competencia para proteger este tapiz diverso de servicios en la nube, las configuraciones incorrectas seguirán siendo una vulnerabilidad atractiva. A medida que evoluciona la dinámica danza de las configuraciones en la nube, las empresas que manejan múltiples proveedores deben mantener una vigilancia inquebrantable y tomar medidas proactivas para abordar las configuraciones incorrectas, fortaleciendo su postura de seguridad.
En la orquestación de la seguridad en la nube, el arte no reside en la erradicación completa del riesgo, sino en la navegación elegante y la gestión proactiva de estas complejidades. Comprender estos desafíos potenciales permite a las organizaciones crear una defensa resistente que les permita atravesar el panorama dinámico de la computación en la nube de forma segura y única.
Exposición no gestionada a amenazas potenciales
El término “superficie de ataque” se refiere a la vulnerabilidad general de su entorno. La integración de microservicios tiene el potencial de aumentar significativamente la cantidad de cargas de trabajo de acceso público dentro de su sistema. Cada carga de trabajo agregada contribuye a la superficie de ataque general. Sin una gestión atenta, es posible exponer involuntariamente su infraestructura de maneras que solo pueden hacerse evidentes durante una violación de seguridad real. Las consecuencias de tal descuido pueden ser nefastas, como lo ejemplifica el escenario indeseable de recibir una llamada a altas horas de la noche debido a un incidente de seguridad. Además, la superficie de ataque se extiende más allá de las vulnerabilidades aparentes. Puede abarcar fugas de información sutiles que pueden explotarse en un ataque.
Para garantizar la seguridad de los sistemas basados en la nube, tenga en cuenta las siguientes recomendaciones:
1. Realizar evaluaciones de riesgos rutinarias para identificar riesgos y vulnerabilidades emergentes.
2. Priorizar e implementar controles de seguridad para mitigar eficazmente los riesgos identificados. Si es necesario, solicitar ayuda a expertos en seguridad.
3. Documentar y revisar periódicamente todos los riesgos aceptados conscientemente, garantizando una comprensión integral de las implicaciones asociadas y las posibles consecuencias.
Panorama de amenazas a la seguridad en la nube
En el ámbito de la seguridad en la nube, las amenazas se materializan como ataques intencionales a sus activos, que aprovechan los riesgos inherentes. A continuación, se presentan cuatro amenazas distintivas que se encuentran en el ámbito de la seguridad en la nube:
Amenazas persistentes sofisticadas (SPT):
Un SPT representa un ciberataque altamente refinado y prolongado, en el que un infiltrado establece clandestinamente una presencia dentro de una red, con el objetivo de exfiltrar datos confidenciales durante un período prolongado.
Características: Los SPT se apartan de los ataques oportunistas y navegan metódicamente por las cargas de trabajo, buscando sistemáticamente información valiosa para posibles transacciones ilícitas. Estos ataques suelen comenzar con la implementación de exploits de día cero y permanecen sin ser detectados durante períodos prolongados.
Dinámica de amenaza interna:
La dinámica de amenaza interna encapsula los riesgos de ciberseguridad provenientes del interior de la organización, a menudo planteados por empleados actuales o anteriores o individuos con acceso directo a la red de la empresa, datos confidenciales y propiedad intelectual (PI).
Características: Estas amenazas resultan difíciles de detectar, ya que los perpetradores poseen conocimiento de los sistemas, procesos y políticas de la organización, lo que hace que su detección sea un desafío matizado y que aproveche el conocimiento interno.
Vulnerabilidades de hora cero:
A pesar de que la nube opera en “la computadora de otra persona”, el uso persistente de sistemas informáticos y software, incluso dentro del centro de datos de otra organización, expone vulnerabilidades a ataques de hora cero.
Características: Los exploits de hora cero se dirigen a vulnerabilidades sin parches en software y sistemas operativos populares. Incluso con un entorno de nube configurado meticulosamente, estos exploits presentan riesgos al otorgar acceso no autorizado a la infraestructura de la nube.
Tácticas de ataque digital:
Las tácticas de ataque digital implican esfuerzos deliberados por parte de ciberdelincuentes, piratas informáticos o adversarios digitales para violar una red o sistema informático para manipular, robar, erradicar o exponer información.
Las manifestaciones comunes incluyen la propagación de malware, esquemas de phishing sofisticados, ataques de denegación de servicio (DoS) y de denegación de servicio distribuido (DDoS), inyecciones de SQL y exploits arraigados en la Internet de las cosas (IoT).
Gestión de amenazas a la seguridad en la nube: mejores prácticas
Abordar eficazmente la multitud de ataques específicos plantea un desafío considerable en salvaguardar la infraestructura de la nubeSin embargo, las tres pautas siguientes pueden servir como medidas cruciales para proteger sus activos en la nube de una variedad de amenazas:
- Cumplir con estándares de codificación seguros durante el desarrollo de microservicios.
- Revise y valide exhaustivamente su configuración de nube para identificar y corregir cualquier vulnerabilidad.
- Establezca una base segura y participe de forma proactiva en la búsqueda de amenazas para reforzar sus capacidades defensivas.
Desafíos en la seguridad en la nube
Para abordar los desafíos de la seguridad en la nube, es necesario superar la brecha entre el conocimiento teórico y la implementación práctica. Si bien se reconoce la importancia de contar con una estrategia de seguridad en la nube, resulta crucial determinar el punto de partida, abordar el cambio cultural y delinear los pasos prácticos diarios necesarios para hacer realidad esta estrategia.
Gestión de identidad y acceso:
Dominar la gestión de identidades y accesos (IAM) es un problema crítico en la seguridad en la nube. Si bien se reconoce su importancia, el verdadero desafío se desarrolla en los intrincados detalles de implementación. La elaboración de una estrategia de IAM integral implica una danza matizada de tres pasos: comenzar con un diseño de roles sólido, que no esté limitado por ningún sistema de IAM específico; coreografiar una estrategia de gestión de acceso privilegiado (PAM) para proteger los roles con privilegios aumentados; y ejecutar los roles meticulosamente diseñados dentro del servicio de IAM del proveedor de la nube elegido. Esta coreografía garantiza una sinfonía bien orquestada de definición de acceso, control de privilegios e implementación perfecta.
Brecha en conocimientos sobre seguridad en la nube:
Para dar el salto a la nube es necesario deshacerse de los modelos de seguridad tradicionales de los centros de datos y adoptar un nuevo atuendo adaptado a la nube. El desafío consiste en dotar a los administradores de los conocimientos y las habilidades adecuados para este entorno dinámico. Este conocimiento es necesario para evitar que las organizaciones sufran vulnerabilidades, especialmente para comprender las complejidades del modelo de responsabilidad compartida. Es imprescindible planificar meticulosamente, garantizando una alineación armoniosa de las medidas de seguridad con los desafíos distintivos que presenta la computación en la nube.
Navegando por la nube de cumplimiento:
Navegar por el panorama regulatorio en la nube se vuelve complejo, con movimientos dictados por estándares como PCI DSS e HIPAA para proteger datos confidenciales. Las organizaciones a menudo ajustan las riendas del acceso para cumplir con las normas y definen meticulosamente los permisos de los usuarios. Sin controles de acceso sólidos, monitorear el acceso a la red se convierte en una maniobra de equilibrio regulatoria. La elaboración de una estrategia integral de gestión del acceso surge como un acto fundamental, que garantiza un rendimiento constante que se adhiere a las obligaciones regulatorias sin omitir ningún paso.
Shadow IT reveló:
El enigma de Shadow IT encubre los protocolos de TI estándar y desafía la seguridad al eludir los procesos tradicionales de aprobación y gestión. Como solistas ágiles, los empleados suelen recurrir a servicios de nube independientes, lo que genera un crescendo descontrolado en el uso de los recursos. Esta sinfonía descentralizada genera activos que pueden carecer de las fortificaciones de medidas de seguridad sólidas, lo que los vuelve vulnerables a la melodía de las contraseñas predeterminadas y las configuraciones incorrectas. Armonizar la seguridad con el ritmo rápido de las actividades de DevOps se convierte en la clave, lo que requiere un enfoque unificado que permita la implementación segura de aplicaciones sin dañar la agilidad ágil de DevOps.
Para abordar estos desafíos se necesita un ballet sincronizado entre los equipos de TI, seguridad y DevOps. Es una actuación en la que cada participante comprende su rol, lo que permite la creación de soluciones que resuenan con el ritmo único del entorno de la nube, manteniendo al mismo tiempo la velocidad y la gracia que son parte integral del arte de DevOps.
Con el conocimiento y los sistemas adecuados, incluidas las soluciones de recuperación ante desastres, los ciberataques se pueden mitigar de manera efectiva y las empresas y sus clientes pueden sentirse seguros.
Implemente medidas de recuperación ante desastres con Hystax y proteja su negocio, sus clientes y sus activos de la amenaza del ransomware.